Los consejos de prudencia son frases que describen la medida o medidas recomendadas para minimizar o evitar los efectos adversos causados por la exposición a una sustancia o mezcla peligrosa durante su uso o eliminación.
Los consejos de prudencia (equivalentes a las anteriores frases S) se seleccionan de entre los establecidos, debiendo figurar en las etiquetas para cada clase de peligro. Se agrupan en:
- consejos de prudencia general (Tabla 10),
- consejos de prevención (Tabla 11),
- consejos de respuesta (Tabla 12 ) y
- consejos de almacenamiento y eliminación (Tabla 13).
En la etiqueta figurarán todos los consejos de prudencia correspondientes (máximo 6), excepto los que resulten claramente innecesarios.
Si el producto es para el público general, es necesario que conste algún consejo de prudencia relativo a su eliminación y a la de su envase. En los demás casos esto no sería necesario si la sustancia y el envase no presentan peligros para la salud y el medio ambiente.